sábado, 25 de enero de 2014

El final de Breaking Bad

Debo decir que me ha encantado la serie, especialmente el desenlace me ha dejado muy buen sabor de boca aunque quien conozca la trama sabrá que es un drama tremendo el de Walter White y sus actividades. Voy a hablar de todo tipo de Spoilers, aviso.
 
Hay que agradecer una serie como esta, con unos personajes tan bien definidos, que tienen unas motivaciones muy claras, y aunque desempeñan conductas límite toda la ficción es de lo más realista. También hay que agradecer que no se me ha hecho larga. Creo que 5 temporadas ha estado bien y más habría sido excesivo. La serie vivió un momento álgido con el final de Gus Fringe, y la subida a las alturas del imbatible Heisenberg, pero por coherencia finalizó con el final de Walter White para concluir la historia.
 
Y ya se sabe que el tiempo pone a cada uno en su sitio y que estando metido en el mundillo de venta de drogas (metanfetamina) a gran escala o se tiene una organización muy sólida (y aún Gus Fringe la tenía) o es posible acabar mal. Pero es que además el moralismo acaba pesando en el argumento porque todos los personajes acaban pagando por haberse involucrado en actos delictivos, aunque quizás Jesse Pinkman (que paga y bastante) es el que mejor sale parado pues logra huir con vida.
 
Pero Walter White no. Había cometido demasiados delitos por voluntad, como así declara en el último episodio a su mujer en una escena memorable, "lo hice por mí". A pesar de este reparto de justicia ineludible, Walter White consigue engancharnos a través de su plan para hacer llegar dinero a su familia (excelente idea, y cierra el ciclo con quienes se aprovecharon de él), y aunque no recuperarla, al menos sí poner las cosas en su sitio que se habían ido de las manos por su causa (liberar a Jesse y vengarse de todos los implicados).
 
Al final, Walter no se puede quedar con su mujer, ya demasiado dolida (y aún culpable) como para perdonarlo, ni sus hijos, pero sí tiene una última escena con su otra vida, la de fabricante de meta donde era desde luego el mejor. Así, a pesar del cáncer consiguió estar más vivo que nunca.
 
Descanse en paz Walter White, a saber cuándo encontraremos otro gran personaje como él, tirano y debilucho, genio y pardillo, padrazo y delincuente.
 
 
 

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